Caracas 04/Marzo/2019 Redacción
Revisando entre las redes sociales , me encontre con esta reflexión de un venezolano que hasta hace poco fue funcionário público , de una institución dedicada desde hace mas de 20 años a atender la alimentación infantil en Venezuela, algunos parrafos lleno de dureza tristeza y un sentimiento de impotencia .
Nos contactamos con él , a fín de obtener su autorización para públicar su trabajo, nos dijo que si , pero solo una condición , que no mencionaramos su nombre , ya que esas letras eran el pensamiento y sentimiento de todo un pueblo, no le pertenecia a el; Le pértenece a una patria y sus hijos que sufren dia a dia las erroneas desciciones de un gobierno que los lleva a la nada . He aqui su testimonio:
Nunca me he sentido tan libre como ahora.
Un sinfín de sentimientos encontrados cuando renuncie de mi último empleo, en el cual pensé siempre llegar a mi jubilación. Amaba esa institución por la noble misión que ejecutaba.
Pero era imposible bajo lineamientos políticos donde prevalece la fidelidad por encima de la institucionalidad y la capacidad, que nada funcione.
El socialismo como filosofía de vida no es malo, malo es cuando te disfrazan de socialismo un totalitarismo, donde lo enunciado no es más que meras palabras que contradicen las acciones y los hechos.
El poder decir lo que quiero, escribir lo que pienso y actuar a mi propio criterio me hace sentir libre, sin tener que ahogar mis opiniones, mis ideas y pensamiento por mantener un empleo, una dadiva o un bocado de alimento.
Bien expuso stailin el tristemente célebre dictador ruso ante su servil buro político que los ciudadanos son gallinas desplumadas, si así como lo leen, delante del auditorio tomo una gallina viva y comenzó a desplumarla lenta y cruelmente, la pobre gallina pataleaba de dolor y gemía fuertemente, luego de desplumarla, ensangrentada y maltratada, stailin introdujo una mano en el bolsillo de su pantalón y saco un puñado de maíz, y comenzó a regar por todo el auditorio los granos, la gallina a pesar del cruel trato que le habían dado le seguía por donde quiera que el caminaba, iba tras el cruel mal tratador solo por conseguir los granos de maíz que calmaban su hambre.
Esa es la realidad que aun vive mi amado pueblo Venezolano, siguen tras el maíz que el opresor le lanza como vil limosna y le hace creer que depende de él para subsistir, así lo maltrate cruelmente.
Es la libertad del elefante del circo.
Que habiendo sido criado en el circo encadenado de tal forma que solo podía moverse cinco metros, paso su vida entera, solo se movía fuera del perímetro, a la arena del circo para servir de espectáculo al publico exterior, a cambio de algunos Manises que introducía en su boca su domador entrenador.
Cuando el elefante estuvo viejo, sus dueños decidieron soltarlo para que fuera libre, el elefante nunca se movió más allá de cinco metros, y solo lo hacía cuando su dominador le llamaba para darle algunas migajas en su boca, aun siendo libre.
Esta sociedad ha sido oprimida, acostumbrada, domada a no salirse de su perímetro, y solo se desplaza para recibir algunas dadivas, para hacer bulto y conglomerado que luego es filmado y fotografiado, para servir de propaganda política ante los ojos del mundo, desvirtuando la realidad q existe a lo interno.
Ha sido desplumada, como aquella gallina ensangrentada y adolorida que aun corre tras las migajas que lanzan sus opresores y torturador.
No hay nada más cruel en la vida que la dependencia, y eso hacen de las sociedades progresistas y prosperas estos regímenes disfrazados, hacer que los pueblos dependan de esas migajas, para tratar así de mantener su fidelidad, y lo peor, la mantienen en algunos estratos sociales.
Bajo la ilusoria promesa de acabar con la pobreza y buscar la igualdad social, solo alcanzan a multiplicarla y engrandecer aun más la desigualdad, los ricos se van del país, y los adulantes del gobierno asumen sus puestos como nuevos ricos. Los pobres se convierten en parias que se sustentan de las migajas que caen de la mesa de sus amos, si sus amos porque en eso se convierten. No hay trabajo, no hay comida, no hay medicinas, no hay nada sino estas arrastrado al régimen.
La sociedad se convierte en dependiente e improductiva, conformista, débil y desnutrida, de bajo coeficiente intelectual, se acostumbra a ser parasito, a que todo se lo den, a no pagar impuestos, ni servicios, a odiar el trabajo y a mar la adulancia.
En el mundo muestran imágenes de multitudes siguiéndolos, la gran mayoría va a esos eventos obligados por sus patronos, o esperanzados por promesas de casas, empleos o sencillamente por una cajita de miseria como califico a las cajitas clap.
Siempre con la amenaza, la presión de que sino participas correrás con las consecuencias.
Yo decidí ser libre, ya no mas aguantar presiones y amenazas, y aun si por ser reaccionario tuviera que ir preso, solo mi cuerpo lo seria, mi mente y mi pensamiento seguirán siendo libre, mi letra y mi verbo seguirán predicando la libertad, y seguirían siendo el mayor critico de estos regímenes mentirosos, que solo esclavizan a los pueblos para disfrutar ellos a plenitud las riquezas de una nación.
Acaso es la mayor suma de felicidad posible no tener agua, ni servicio eléctrico, ni efectivo, ni empleo, ni un sueldo respetable, ni comida, ni medicamentos, ni efectivo, ni acceso a la tecnología de punta, ni poder sacar tu dinero del banco, ni poder comerte un helado con tu familia, ni tomar unas vacaciones, ni aun ir de un pueblo a otro, ni tener poder adquisitivo para una casa, un vehículo, o un artefacto del hogar????
Basta de culpar a otros por su propio fracaso, bueno en realidad no fue un fracaso, al contrario tuvieron éxito, porque la realidad es que ellos llevan a las sociedades a esos estados de deterioro para poder dominarlos con las migajas. Para alguien que no tiene luz, una vela es un tesoro, para alguien que no tiene alimento una caja de miseria es el primer premio de la lotería, para un enfermo que no tiene medicina ni
Como ir a un médico, un médico cubano que te da piroxican y paracetamol para cualquier dolencia es lo máximo.
AHHHH pero todo tiene su precio: debes serme fiel, seguirme, apoyarme aunque te desplume, aunque te quite la cadena, de lo contrario quedas execrado de cualquier “beneficio”.
Hermanos seamos libres, no continuemos detrás de nuestro opresor mendigando las migajas para subsistir, levantémonos, con dignidad y verán que ellos solos se irán cuando ya no tengan serviles, que les hagan el trabajo para ellos vivir como jeques en un país de pordioseros y mendigos.
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