China planea enviar en 2020 un 'rover' a Marte para explorar el planeta rojo

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Liang Keyan / www.globallookpress.com

China planea enviar en 2020 un 'rover' para explorar Marte, según reveló el pasado domingo Wu Weiren, diseñador jefe del programa de exploración chino durante un evento en Pekín.

"El año que viene lanzaremos una sonda de Marte que lo orbitará, aterrizará en él y lo explorará", dijo Wu, añadiendo que, pese a los logros alcanzados por China en las últimas décadas, "todavía existe una gran distancia respecto a las potencias espaciales mundiales", por lo que el país asiático debe "acelerar su ritmo".

Asimismo, afirmó que el vehículo explorador Chang'e-4, que el pasado 3 de enero aterrizó en la cara oculta de la Luna para examinarla, tiene que hibernar con frecuencia para preservar sus capacidades debido a las condiciones extremas del lugar, donde se alcanzan los -190 ºC, una temperatura que "los componentes electrónicos no pueden soportar". Además, detalló que la sonda se dirige actualmente al noroeste de su lugar de aterrizaje, el cráter Von Kármán, después de haber obtenido "una gran cantidad de datos en los últimos días" que se revelarán próximamente al mundo.

Base de simulación de Marte

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Por otro lado, Pekín anunció el pasado viernes la apertura de una base de simulación de Marte en la cuenca de Qaidam, una región hiperárida situada al oeste de China que está considerada como uno de los lugares más parecidos a la superficie marciana en nuestro planeta, informa Global Times.

De acuerdo con este medio, la instalación, que será administrada por el Estado, tiene un coste de 22,3 millones de dólares y abarca un área de 53.330 kilómetros cuadrados con capacidad para 60 personas en cápsuslas y cientos más en carpas establecidas alrededor de la base.

Sin embargo, Jiao Weixin, profesor en Ciencias Espaciales de la Universidad de Pekín, comentó que "es extremadamente difícil simular Marte debido a sus especiales características naturales y su entorno hostil", pues —señaló— allí hay una baja presión de aire, fuertes radiaciones y frecuentes tormentas de arena, además de existir significativas diferencias geográficas entre ambos planetas.